jueves, 26 de marzo de 2009

El servicio de experiencias educacionales

¿Por qué los postulantes prefieren ir a una determinada institución educacional en vez de otra?


Los alumnos no son sólo buscan productos educacionales, sino verdaderas experiencias en la institución que les provean de sensaciones y recuerdos que les resulten interesantes e innovadores. Quizás esto explique porqué algunas instituciones con productos educativos regulares y atención mediocre tienen de todos modos una buena aceptación.

Una institución educacional no solo debe ofrecer productos y servicios educativos, eso lo hacen todas, sino diseñar y crear gratas y novedosas experiencia positivas que superen las expectativas y que además les dejen "algo especial" al alumno. Un recuerdo para siempre, que comentará a otros.

Los servicios educacionales deben ser, para el alumno, como vivir una película participando de las escenas creadas y planeadas a través del mismo establecimiento, escenificado con la ambientación, los muebles, las luces, el equipamiento, la infraestructura etc. Un escenario en el que serán puestos los actores, académicos y personal, que interactúan con ellos, quiénes tienen un guión, y saben cómo deben interpretarlo, así también es importante que sepan qué clase de experiencias deben fabricar para sus clientes-usuarios-alumnos de modo de asegurar no sólo una satisfacción sino, de que sus experiencias sean verdaderamente inteligentes y legendarias.

No hay servicio educativo sin acción. Todo servicio educacional implica una experiencia.

miércoles, 11 de marzo de 2009

Educación Superior

Profesionales preparados EFECTIVAMENTE para el “mundo real”




Uno de los aspectos más importantes en una estrategia es el producto educacional de una universidad o instituto. Por un lado, la calidad de lo que se enseña en las aulas y por otro lado el resultado de lo enseñado y aprendido por el estudiante para enfrentarse sólidamente el mercado laboral.

En Chile, las empresas, al momento de decidir la contratación de un profesional recién egresado, se fijan en primer lugar en las características personales de los postulantes y, posteriormente, en la institución de educación superior de la cuál egresó.

Una institución de educación se prestigia cuando su enseñanza y sus alumnos responden a las expectativas del mercado y son competitivos. Se genera el comentario: “enseñan bien y sus egresados poseen las competencias apropiadas para desempeñar su trabajo”. La recomendación boca-oreja de las empresas y la opinión pública genera aspectos importantes en la proyección de la imagen de una institución. Colabora en la consolidación de la marca educacional.

Pero la realidad es otra y muchas instituciones no han asumido falencias fundamentales en la formación de sus alumnos: las habilidades extracurriculares. Muchas consideran que basta con enseñar las materias para cumplir la tarea, sin reconocer importantes necesidades que el mercado laboral requiere actualmente.

Los jóvenes egresan de la educación superior chilena con falencias en expresión oral y escrita, en habilidades interpersonales y en dominio de idiomas; con incapacidad de liderazgo, falta de autonomía para tomar decisiones e incapacidad para dirigir equipos de trabajo. Incluso la mayoría no sabe identificar y resolver problemas y aún menos tomar decisiones.

Las carencias mencionadas son habilidades que las empresas y el mercado laboral exigen en el mundo de hoy, por lo tanto, el producto que preparan y lanzan al mercado muchas universidades e institutos aún es bastante deficiente, en la mayoría de los casos. Aquellas instituciones educacionales que ya están cubriendo esas necesidades del campo laboral con sus egresados van un paso adelante en este competitivo mercado y por consiguiente consolidando una imagen positiva ante la opinión pública.

Porque en educación “siempre se habla y se comenta”.

lunes, 9 de marzo de 2009

Colegios: en la mira de la crisis

La crisis económica da sus primeras señales en la educación chilena. Debido a ella muchos alumnos que estaban colegios particulares pagados han debido emigrar a una enseñanza de menor costo de planteles subvencionados. Algunos lo hacen porque sus padres ya no pueden costearlos o para prevenir o disminuir costos, antes que la crisis afecte la economía familiar.

Esta situación plantea una situación estratégica en ambos tipos de planteles educacionales. Por una parte, los colegios subvencionados tienen una gran oportunidad para el crecimiento con los nuevos alumnos que están solicitando matrícula para ingresar. Por otra parte, los colegios particulares pagados, quiénes son afectados por la deserción y la consiguiente merma financiera, deben darse la oportunidad para reflexionar sobre la respuesta que darán a la crisis. Para ambas situaciones es la ocasión propicia para generar perspectivas de largo plazo en el proyecto educativo.

Las amenazas generan oportunidades. Las estrategias de marketing educacional funcionan en un contexto dinámico y ahora es la ocasión de aprovechar las oportunidades que genera la crisis y que, obviamente, afecta el valor de la estrategia original. Las instituciones de educación ahora deben generar respuestas estratégicas concordantes con el nuevo contexto para defenderse de las amenazas y para aprovechar de la mejor forma las oportunidades.

Es en este momento es cuando los colegios deben darle un valor especial a la flexibilidad de reaccionar y consolidarse en el largo plazo.

martes, 3 de marzo de 2009

Gestión estratégica y marcas

El marketing y las marcas educacionales están comenzando a ser un referente principal en la pauta anual de los directivos académicos, aunque todavía existen muchas instituciones educacionales consideran que hacer marketing educacional es hacer promoción con videos, folletos, páginas web, avisos con ofertas, slogans, logotipos etc. El marketing en la educación todavía es parcial, confundiéndose el término con ventas y acciones promocionales, carentes de visión acerca de lo que significa una filosofía del conjunto de elementos que conforman una estrategia integral.

Esto trae como consecuencia que el posicionamiento se convierte en algo difuso e indefinido, sobretodo por la realización de campañas sin orientación estratégica, con creatividad, imágenes, argumentos y diseños que dan la sensación de algo ya visto. Sin personalidad propia.

La gestión del marketing educacional necesita, para ser eficaz, el alineamiento de tres componentes: el aspecto académico con sus productos y servicios, el aspecto empresarial, considerando que toda institución educacional es una empresa y el público en todos sus segmentos relacionados. Implica la aplicación del marketing y el planeamiento estratégico a la educación, mediante la adaptación y las características necesarias para cada requerimiento.

El modelo sitúa a los niveles de usuarios en el centro de la estrategia competitiva dirigida, específicamente, a segmentos con distintas necesidades y sus correspondientes estrategias de marketing para ellos, buscando la preferencia de esos usuarios por los productos y servicios educacionales creados por la institución.

El concepto que se está comenzando a entender y a aplicar es que las instituciones educacionales deben gestionarse utilizando criterios similares al de las empresas, considerando que la dirección estratégica es clave en el éxito o fracaso de un modelo de gestión educativa moderno, dirigida a un mercado objetivo específico y orientado a generar cambios en los actuales y potenciales usuarios en el largo plazo.

Se busca generar conexiones entre los públicos de la institución educativa con las estrategias de desarrollo académico y económico de la organización, establecer políticas sostenidas en el largo plazo, una inversión acorde con los objetivos de marcar notoriedad en una área sobrecomunicada, establecer con precisión las audiencias a quiénes se dirige, definir el conocimiento perceptivo que tiene la institución y coordinar todos los niveles de acción.

Tiene como objetivo desarrollar los conceptos principales con base en los atributos emocionales, empleando ideas diferenciadoras fundamentadas en la simplicidad y la fácil comprensión por parte de los diferentes públicos y que a la vez sea aplicable en distintas formas y formatos bajo la directriz de un eje central.

Dos realidades son afectadas e interactuadas por la aplicación del modelo: por una parte la gestión empresarial y por la otra la gestión académica. Estos dos aspectos se ordenan mediante una configuración de la realidad física y su dimensión conceptual para, enseguida, entrar a la fase de la gestión estratégica mediante la proyección de la identidad en formato de imagen y finalmente finalizar con la materialización operativa de la gestión de marketing y comunicación.

La marca

El procedimiento de construcción de la marca comienza identificando los motivos por los cuáles la organización es importante y necesaria para la comunidad interna y externa. Una investigación previa a la aplicación estratégica permitirá determinar una promesa y los factores que la hacen única para el segmento objetivo. Desde allí se elabora su proyección en el futuro inmediato y en el largo plazo.

Es clave identificar los contenidos académicos asociados a los productos y servicios educacionales, los que darán una identidad distintiva y poderosa. Esto significa que la gestión estratégica no está centrada, propiamente tal en la institución, sino en la imagen y el poder de la marca ante su mercado actual y potencial. El cruce entre la identidad y la imagen se da en el contexto del aspecto real y objetivo de la institución y la percepción por parte de los públicos, implicando ello la articulación de una identidad coherente e integrada y la proyección de una imagen interesante y novedosa.